viernes, 7 de marzo de 2008

Son bonitas las épocas de mudanzas

Son bonitas las épocas de mudanzas. Al menos deberían serlo. Después de todo, siempre hay que verle el lado positivo a los cambios. Sé que estás pensando que las mudanzas también pueden ser tristes o dolorosas… lo sé. Dímelo a mí que llevo más de diez o doce a lo largo de mi vida. No te agobies. Hazte a la idea de que de todo se aprende. Esto te hará ver las cosas con otros ojos y estar más abierto a este tipo de cambios.

Entonces: nuevo piso, nuevo barrio, nuevos vecinos, quizás nuevo trabajo, o nueva pareja o nuevos amigos.

Sea por la razón que sea, estás buscando un piso en alquiler. Te has peleado con tu pareja, te mudas de ciudad, buscas algo más grande o más chico, o se te ha vencido el contrato que tenías y no te lo han querido renovar… sea como sea, encuentro bonitas las épocas de mudanzas.

Me gustan esos días de caos en los que el piso nuevo que acabas de alquilar parece amueblado por pilas de cajas cerradas, y otras abiertas, vacías por la mitad, o llenas por la mitad, como más te guste verlo.

Es un poco estresante la etapa de búsqueda, aunque hay que aprender a disfrutarla también.

Esa etapa de buscar pisos en alquiler recorriéndote todas las inmobiliarias, intentando encontrar lo más barato, o lo que más te gusta, intentando que te elijan a ti como inquilino en lugar de a esa otra pareja en la que él es ingeniero y ella abogada.

Esos días desesperados, llegas a tu casa y prosigues la búsqueda de piso desde tu ordenador: webs de anuncios clasificados. Comienzas visitando www.pimpam.net y te ofrece miles de anuncios clasificados. Buscas por zona, por precio, miras en particulares y en inmobiliarias también. Quieres acaparar todo el terreno. Estas decidido a encontrar un piso en alquiler en el que te quedarás diez años por lo menos.

Recuerdas la posibilidad de poner un anuncio clasificado indicando que buscas un piso en alquiler, y detallas minuciosamente las características de lo que tienes en mente. Quienquiera que lea ese anuncio, percibirá que estás decidido y que sabes perfectamente lo que buscas.

Tampoco te olvidas de preguntarle a todos tu amigos si conocen a alguien que alquile un piso. Amueblado si es posible, aunque si no es así, también te viene bien. Después de todo, es lindo salir a caminar por las noches y ver los muebles que están tirando los vecinos y preguntarse: ¿eso es una mesa? ¿está entera? ¿esa silla hará juego con la mesa del comedor? ¿podrá subirse por el ascensor o tendré que usar la escalera?

La búsqueda de piso en alquiler prosigue su curso. Llega el domingo y compras no uno, sino dos periódicos y lo primero que lees son los anuncios clasificados. Te pasas una o dos horas leyendo esas pequeñas letritas que parecen escritas para gente con ojos gigantes o con demasiada buena vista.

Y ahí nomás, justo cuando decides que mañana mismo comprarás una lupa para no quedarte ciego, acabas de leer todos los anuncios clasificados. Luego te relajas un rato leyendo el periódico y te enteras de cómo va el mundo. Intentas no pensar en alquilar un piso.

En ese momento aún estás un poco estresado. Quieres quitarte el problema de encima lo antes posible, y continúas sin pensar en lo bonitas que son las épocas de mudanzas.

No piensas en lo divertido que es acomodar todos tus muebles en un espacio nuevo. Pasarse un día moviendo muebles de un lado al otro, revisado que nada se haya golpeado, que no se haya roto la vajilla, ni tus CDs de música o tus DVDs. Limpiarle la tierra al ordenador y a la TV y al home theatre y volver a conectarlos es otro paso. Volver a ver todos esos cables que invaden tu piso y que debes esmerarte en esconder y olvidar hasta que te vuelvas a mudar.

Quizás si alquilas un piso haya que pintarlo. Quizás te guste pintar y lo hagas por el sólo hecho de vivir entre paredes relucientes. Yo, personalmente, odio pintar los pisos. Esta es la única cosa que me hace dudar cada vez que pienso en mudarme.. ¿habrá que pintar las paredes?

Exceptuando esta pequeña eventualidad que quizás tú ames tanto como a la vida misma, creo que las épocas de mudanzas son muy bonitas.

Espero que encuentres un piso en alquiler pronto y comiences a disfrutar de la mudanza sin verla como un problema.